martes, 26 de febrero de 2013

Barroco en MexicoADAA


Movimiento artístico que apareció a finales del siglo XV se preservó hasta mediados del siglo XVIII. Lo más destacado del arte barroco novohispano se encuentra en la arquitectura religiosa, donde los artesanos indígenas le dieron un carácter único. Destacan la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México con su Altar de los Reyes, la iglesia de Santa María Tonantzintla en el Estado de Puebla, el convento jesuita de Tepotzotlán en el Estado de México, la Capilla del Rosario en la iglesia de Santo Domingo en la ciudad de Puebla, el convento y el templo de Santo Domingo de Guzmán de Oaxaca, y la iglesia de Santa Prisca en Taxco, Estado de Guerrero, aunque la estructura como el trazado de las construcciones siguen el modelo europeo, el artista americano deja huella con su decoración como: las flores de cantuta, los charangos, los soles y las lunas. Pero también hay manifestaciones barrocas en la poesía y el teatro de, respectivamente, los novohispanos Sor Juana Inés de la Cruz y Juan Ruiz de Alarcón.
Algunas de las obras de sor juan Inés de la cruz son: Redondillas, Al que ingrato me deja, Amor es más laberinto, Los empeños de una casa, Primero sueño, y una de las famosas Respuesta a Sor Filotea de la Cruz. De conciertos, podemos mencionar un poema convertido en villancico, llamado Ah de las mazmorras.
En las obras de juan Ruiz de Alarcón destacan: la comedia La verdad sospechosa, que constituye una de las obras claves del teatro Barroco hispanoamericano, Las paredes oyen y Los pechos privilegiados
Podemos citar a Víctor L. Tapié en su obra "Barroco y Clasicismo" que las obras barrocas "... las más extrañas, las más exasperadas, aquellas que parecen alcanzar el límite extremo de la invención y de la fantasía, las guarda la América española ...". Tapié nos centra en el porqué de nuestro Barroco al decir que mientras la Reforma protestante no se prestaba a las realizaciones de un arte cristiano suntuoso, los españoles difundieron el catolicismo con su despliegue de ritos y fastuosidad en la construcción y la decoración de las iglesias, que en las Provincias del Imperio español y la costa del Brasil floreció un arte "recargado hasta la confusión, que se presenta como uno de los logros más pujantes del barroco y de la iglesia" como distracción a un acontecimiento histórico y al dominio del otro.
EL BARROCO EN LA NUEVA ESPAÑA
El barroco es un estilo esencialmente escultural, siendo imposible separar la arquitectura de su ornamento escultórico, ya que emplea la escultura en forma de relieve o en estatuas para ornato de los edificios.El apogeo del arte barroco en la arquitectura religiosa de la Nueva España se da entre 1730 y 1781, época en que el estado social es plenamente próspero
En la nueva España hay 3 tipos de barroco
BARROCO SOBRIO
Puede definirse como una reproducción del barroco español, en el que se conservan los órdenes arquitectónicos pero alterando las proporciones de las columnas, se rompen los entablamentos, y toman un carácter ornamental del edificio, perdiendo su función de soporte estructural. En los templos, el barroco sobrio se caracteriza en la portada de ingreso, que se desarrolla en torno a un arco de medio punto flanqueado por pilastras o columnas, pareadas o sencillas; sobre el arco se desarrolla un nicho, una ventana o un relieve. Este tipo de portada es común durante todo el siglo XVII.
Encontramos este mismo tipo de portada en las puertas de ingreso a los monasterios, con la variante que el vano es adintelado y con un nicho o escudo sobre él .En las portadas de las casas, la puerta se abre entre dos pilastras y sobre ésta un balcón o una ventana y más arriba el escudo de armas, si es una casa señorial; en sus fachadas, las puertas y ventanas prolongan sus jambas hasta unirse con el cornizuelo; las cornisas son muy poco voladas y a veces casi no existen; presentan almenas cuando la casa es de un noble.

En esta Época, en Ciudad de México se generaliza el uso del tezontle cubriendo los entrepaños de las fachadas, mientras que jambas, dinteles, cornisas y cornizuelos son tallados en piedra de cantera. Las pilastras aparecen muchas veces almohadilladas.
En las esquinas de los edificios aparece casi siempre un nicho, para el santo preferido por el propietario de la casa o para el santo patrón de la comunidad religiosa dueña de la edificación.
BARROCO RICO
Paralelo al barroco sobrio se empieza a desarrollar una variante del estilo que adorna las portadas de las iglesias con más profusión, rompiendo rotundamente con el orden de los elementos de los cánones clásicos, pletóricas de fantasía y capricho, de lujo refinado. Encontramos en este matiz la gran mayoría de las modalidades del barroco, marcado por el fuste de las columnas, salomónico, en meandro, etc., que después analizaremos al detalle; aparece el uso de relieves en yeso, para generar magníficos ornamentos interiores y exteriores.
BARROCO EXUBERANTE
La riqueza de ornato desborda todos sus límites; respeta la estructura arquitectónica por ser puramente  decorativo, pero invade todo espacio que ésta deja libre, con relieves de argamasa, de yeso en blanco, crema con filetes de oro o policromados, "un derroche total de lujo y fantasía exaltada" como lo ejemplifica la Capilla del Rosario en  Puebla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario